* errores

Les comparto este post de un blog que me gusta mucho. Me hizo acordar a  una vez que me contaron que a los errores, para poder diferenciarlos bien,  primero hay que cometerlos. Como escuché hace algunos años en alguna serie de TV:

[…] There are certain things in life where you know something is a mistake, but you don’t really know it’s a mistake because the only way to really know it is a mistake is to make that mistake and look back and say, «Yup. That was a mistake». So really, the bigger mistake would be to not make the mistake because then you’ll go your whole life not really knowing if something is a mistake or not.

[…] Hay ciertas cosas en la vida que son errores, pero que no se saben si realmente son errores, porque la única forma de saber que lo son es cometiéndolos; y mirar atrás y decir “Sep. Fue un error”. Así que el error más grave sería no cometer el error, porque pasarías toda tu vida sin saber si algo era un error o no.

Pasen, lean y disfruten.

* errores.

(sí, hagan click en el link…)

Unavoidable Eavesdropping

Dedicado a los enanitos que tan afanosamente trabajan en las profundidades de mi bolso.

Una de las cosas que no se pueden elegir, es la capacidad para decidir lo que uno quiere escuchar. Quiero decir, que se puede desviar la mirada de algo que no se quiere ver pero lamentablemente, apagar el sonido es más difícil…Sobre todo en el transporte público cuando te quedaste sin batería o lo auriculares desaparecieron en las profundidades más inhóspitas e inalcanzables de tu bolso. Cuando eso me pasa, no me queda otra que escuchar las conversaciones ajenas, o monólogos ajenos– porque en la mayoría de los casos las conversaciones son de minitas hablando por teléfono como si estuvieran solas. Y se escucha cada cosa…
La falta de contexto de estas conversaciones hace más interesantes aún las declaraciones al pasar. Para mí todas estas frases que escucho carecen de sentido común. Tengo la teoría de que estas frases hechas, que por alguna razón nos decimos las mujeres unas a otra como pasándonos sabiduría ancestral, no son otra cosa que algún aforismo ridículo de autoayuda para convencernos de que efectivamente somos el centro del universo y que todos los hombres deberían amarnos y valorarnos porque…porque….y, porque sí.
Así que en un esfuerzo por volver a este espacio y eludir algunas responsabilidades académicas, probablemente se venga una serie de posts con lo que en mi cabeza les contestaría a estas señoras y señoritas. Pero no prometo nada. Voy a empezar por la que más me impactó hoy que fue: «Quiero un hombre que tenga todo resuelto”
En primer lugar, si querés un hombre que tenga todo resuelto: What does that even mean?!  Si te pusiesen a un tipo con todo resuelto, lo más probable es que primero no te enamores, y segundo que el señor no te necesite, porque ya tiene ese asunto resuelto.
Claro que en la mayoría de los casos, esta frasecita quiere decir que quieren a una persona que no ande boyando sin rumbo, que esté establecida, que tenga objetivos claros, metas concretas y que sepa exactamente lo que quiere (y que casualmente sea lo mismo que querés vos)…¿Conocen a alguien así? Yo no. Imagínense que un hombre así sería alguien que nunca cambia de opinión (jamás ganaríamos una discusión) y que ya viene con todas las decisiones tomadas (no podríamos meter ni un bocado de cambio de planes –con lo que disfrutamos la ciclotimia.)
A veces también el tener todo resuelto implica haber resuelto desajustes emocionales… No estoy segura de que tengamos esa capacidad. Una vez que nos desajustamos emocionalmente no volvemos a ser los ajustaditos de antes pero sí podemos aprender a vivir desajustados. Además, quien no ande con un desamor, desencuentro, rencor o desajuste emocional a cuestas que tire la primera piedra.
Creo que las personas no nos enamoramos de las cualidades o virtudes del otro por si solas. Ya lo había dicho, ¿no? Este tipo de frases no salen si el tema de conversación no es un hombre específico que no está tan resuelto como una querría. No es que una quiere que aparezca un hombre, whoever that may be, y que tenga todo resuelto…Una quiere que ESE hombre con el que ya estamos head over heels resuelva lo que no nos gusta/convence/cierra (a favor nuestro, obvio). Se trata de esta cuestión de querer que el sujeto de nuestro afecto se ajuste al ideal que arrastramos…I’m sorry ladies, eso no se puede.
Una amiga inteligentísima de este blog me dijo una vez, mate de por medio, que vivir se trata de estar en falta siempre y de buscar la satisfacción en todas partes y no encontrarla…(es de mis amigas más optimistas) Así que, a la rubia del Blackberry con dibujitos de Hello Kitty: Mientras esperás que llegue un hombre con todo resuelto, tratá de viajar siempre sentada.

Siempre dejo alguna notita al final

Pero esta vez no. Excepto la canción que tenía la intención de escuchar en el viaje, y no pude.